Imagen: Independiente En el retorno de Julio César Falcioni al banco del "Rey de Copas", los de Avellaneda aguantaron con mucho temperamento y actitud el partido y consiguieron así avanzar a la próxima fase del torneo.
El primer tiempo comenzó con mucho nerviosismo y tenencia en la mitad de la cancha. Ninguno de los dos quería sortear la pelota y prevaleció el orden. Si bien Independiente intentó en varias ocasiones el desborde de Sebastián Palacios, la llegada con los laterales y los pases rápidos en la mitad de la cancha, la situación más clara fue por parte de Estudiantes, estrellando una pelota al travesaño por parte de Fabián Noguera (28 min).
Finalizando la primera mitad, Mariano Andújar desvió en buen centro de Domingo Blanco y evitó una ocasión muy clara para los visitantes.
En el complemento, los dos conjuntos decidieron atacar un poco más y generar ataques. Sin embargo, a los 13 minutos iba a ocurrir una acción vergonzosa por parte del árbitro que cambiaría el rumbo del partido: Thomas Ortega recibió la segunda amarilla por una falta "fantasma" y esto dejó a Independiente con uno menos el resto de encuentro.
A partir de ahí, el conjunto de Falcioni intentó cuidar el resultado y jugar de contragolpe. Los dirigidos por Zielinski intentaron aprovechar esta situación y sacar ventaja de su jugador de más, aunque nunca encontraron la forma y no generaron peligro al arco de Sebastián Sosa. Incluso el "Rojo" tuvo varias situaciones de contragolpe muy interesantes, pero no prosperaron. Ninguno logró romper el marcador y todo se definió en los penales.
En la definición desde los doce pasos, todos los jugadores de Independiente (Silvio Romero, Lucas Rodríguez, Domingo Blanco, Brian Martínez) patearon con efectividad. Sebastián Sosa actuó con mucha picardía, le atajó penales a Martin Cauteruccio y Fabian Noguera y se convirtió en la figura indiscutida del encuentro.
Con mucha euforia y valentía, los de Avellaneda avanzaron de fase y esperan al ganador entre Colón y Talleres para la semifinal de la Copa de la Liga. Julio César Falcioni fue uno de los máximos protagonistas del encuentro, realizando un emotivo festejo al cielo al finalizar el partido.
Lo próximo que tendrá que afrontar “El Rey de Copas” será la
quinta fecha de la Copa Sudamericana frente a Bahía de Brasil en el
Libertadores de América. Este encuentro definirá al puntero del grupo y, probablemente, el clasificado a los octavos de final de la competición.
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