El defensor tomó una decisión sobre su continuidad en Independiente y hay malestar en el cuerpo técnico y los directivos.
La salida de Alan Franco es un tema que se habla en todos los mercados de pases. En las últimas horas los dirigentes rechazaron una oferta del Dinamo Zagreb por U$D 5.000.000 netos por el 100% del pase y el central comunicó que no se entrenará hasta que sea vendido. Desde Independiente buscan que la cifra ascienda en U$D 1.000.000 ya que San Telmo deberá percibir el 20% de cualquier transacción.
Anteriormente equipos de Estados Unidos y México habían sondeado al defensor. Los Ángeles Galaxy fue uno de los interesados en el pasado pero el monto de U$D 2.000.000 no fue suficiente. Como la institución no quedaba satisfecha con ninguna oferta le prometió al jugador surgido de la cantera que sería vendido cuando los números se acercaran un poco más a lo pretendido por Independiente. Al ver que esta promesa no fue cumplida Franco eligió no entrenarse con sus compañeros, pese tener contrato vigente.
De esta forma nace un nuevo conflicto en un Independiente que hace bastante tiempo no tiene días tranquilos. Silvio Romero, previo a esta determinación, se habría comunicado con el central para convencerlo que se quede y sea uno de los referentes del nuevo ciclo. Es probable que a fines de septiembre comience a rodar nuevamente la pelota y hasta el momento Pusineri no solo no cuenta con refuerzos sino que tampoco sabe que jugadores del actual plantel permanecerán en el Rey de Copas.
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